En esta oportunidad queremos compartir 10 pasos para Vivir en Paz y Armonía día a día, para encontrar la felicidad y la paz interior que tanto deseamos. Se trata de incorporar nuevos y pequeños hábitos a nuestros días, y poco a poco eliminaran todo lo que no nos gusta, lo que no nos hace bien y sentimos que nos limita la capacidad de vivir en plenitud, en armonía y en equilibrio.
Puedes leer nuestro artículo en ¿Cómo iniciar un camino espiritual?
Cada ser es único y no existe una única forma de emprender este camino, hay una cantidad infinita que solo tú puedes encontrar, sólo debes iniciar con pequeños pasos para encontrar un equilibrio entre la vida cotidiana y la vida espiritual.
Los 10 Pasos para Vivir en Paz y Armonía son:
1. Gratitud: Comienza el día agradeciendo por las cosas que el universo te está dando:
Puedes agradecerle según tus creencias; a Dios padre creador de todo lo que es, al universo, a Buda, a Allah, a la Madre Tierra y al reino de la naturaleza, al Sol, a la diosa Luna, a tu ángel guardián, a tus guías de luz, a tus maestros ascendidos, a tus animales de poder, a tu yo superior.
Gracias …
- Por un hogar, un techo donde dormir
- Por las personas que te aman y se preocupan por ti
- Por el alimento que comiste
- Por tu pareja
- Por tu mascota
- Por la ropa, los zapatos que llevas puesto
- Por tus amigos
- Por el sol que te calienta y la luna que ilumina la noche
- Por la lluvia que alimenta las plantas que nos dan oxígeno
- Por tu trabajo
- Por la posibilidad de ayudar a un ser
- Por todo aquello que pudiste pagar y pudiste comprar
2. Toma consciencia de tu divinidad:
Estar vivo es la manifestación material de que somos parte de Dios, del universo. Trabájalo con afirmaciones como: “Yo Soy Dios en acción y decido que mi día estará lleno de Amor, Paz y todo será perfecto para mi aprendizaje”
3. Desayuna en tu casa antes de salir a trabajar:
Sé que a muchos les cuesta levantarse temprano, y prefieren dormir 15 min más en vez de usarlos para desayunar. Pero desayunar aparte de ser el combustible esencial que nuestro cuerpo necesita para funcionar bien el resto del día, nos brinda un bienestar de autoestima y amor propio, ya que es una acción de auto cuidado, de sacar tiempo para nosotros.
4. Sé amable, Saluda:
Saluda a cada persona que se acerque a ti, que comparta tu camino o tu rutina. Practicar la amabilidad nos hace sentir mejor y regalas una sonrisa a los demás. Muchas veces, más de lo que pensamos, no nos damos cuenta cuanto necesita una persona un saludo cordial, una sonrisa, una bienvenida.
5. Elimina prejuicios:
No es un punto sencillo, ya que desde pequeños nos inculcan los prejuicios de otros, de nuestros padres, maestros, amigos.
Desde el sistema de creencias, dogmas, ciudad donde nacemos, donde crecemos en nuestros primeros años, los docentes que nos tocaron, el tipo de escuela/colegio, el país, incluso el idioma.
Todo esto nos condiciona y nos enseñan a poner barreras. Señalamos al que habla con otro acento, u otro idioma; al extranjero; al de píel de color diferente al nuestro, al que sigue otra religión, al que tiene más o menos dinero, al que se viste diferente, etc. ¡Elimina todo estos prejuicios! Somos todos humanos que queremos vivir en paz, en amor y tranquilidad.
6. No juzgues:
Va de la mano con el punto anterior. Deja de juzgar, no sabes qué es lo que la otra persona está viviendo, cuáles son sus propios fantasmas, que vivió en su niñez. Esto te hará obtener empatía y lograrás ponerte en el lugar del otro y tender una mano si es necesario.
7. Empieza a decir Te Amo:
Reprimimos nuestros sentimientos por el qué dirán. Es una de las principales barreras para encontrar la paz interior, aunque nos cueste al principio. Expresa con amor lo que sientes. Expresa lo que sientes sin esperar nada a cambio, sin importar lo que dirán a cambio.
8. Mantén la calma:
El auto control es una habilidad que se crea y se trabaja a diario. Si por algún motivo, o laboral o sentimental hay alguna diferencia, mantén la calma y presenta tus argumentos. Sé sincero e identifica si son válidos, sino, acepta la razón del que la tiene. Pero no levantes la voz. Te permitirá pensar con claridad y decidir mejor tus opciones.
9. Aceptación:
Entender que los tiempos nuestros no son los mismos tiempos de los demás, que cada persona ve el mundo diferente, que cada uno de nosotros vino al mundo a aprender cosas diferentes y está en su propio proceso individual.
Comprender que no todos tienen las mismas actitudes y aptitudes para llevar una tarea a cabo, todo esto nos permitirá aceptar que todo es como debe ser, y que cada está donde está por sus propias decisiones. También nos permitirá eliminar prejuicios e incluso ayudar a quién lo necesite.
10. Atención:
Presta atención a los pequeños detalles. Elimina los pensamientos por momentos, deja de pensar en el pasado, en lo que sucedió, también deja de pensar en el futuro y en lo que puede suceder.
- Siente tu respiración, trata de realizarlo varias veces durante el día
- Disfruta de acariciar a tu mascota, de mirarle a sus ojos y sentirle su pelaje, su olor
- Mira a los ojos a las personas, trata de ser consciente de su divinidad.
- Siente la naturaleza a tú alrededor: Presta atención al sol que toca tu piel, a la lluvia y su sonido, al cantar de los pájaros, la textura de las hojas, de las flores que tienes cerca, la corteza del árbol a tu lado. Identifícalo sin etiquetarlo, sin pensar.
- Siente el sabor de cada alimento que ingieres, de cada bebida. Reconoce.
- Escucha el sonido del viento rozar las hojas de los árboles
Te brindamos ejemplos desde nuestra experiencia, desde lo aprendido en nuestro camino, pero seguro vas a encontrar como aplicar estos 10 puntos según tu propia forma de vivir, tu rutina, tu percepción.
Comparte este artículo con tus amigos y muéstrales que siempre hay una mejor formar de vivir sus días. Que la felicidad y el equilibrio se construye día a día con nuestros actos.
2 comentarios
rosa melano · 14/05/2020 a las 4:50 am
muy buen trabajo
Alu · 27/05/2020 a las 10:08 pm
Hola Rosa, muchísimas gracias, seguiremos trabajando para seguir entregando información de valor.
Te mando un abrazo, Ale Toro